Guía del participante nuevo (RdA)
Sobre esta guía
La guía que tienes frente a ti ha sido escrita con el fin de orientar a personas sin experiencia previa y/o que participan en sesiones de ayahuasca que se encuentran geográficamente fuera del contexto amazónico.
Aquí encontrarás información sobre qué es la ayahuasca, sus efectos, beneficios y riesgos y las particularidades de la sesión en la que vas a participar.
También podrás leer acerca de las contraindicaciones, consideraciones éticas, derechos y deberes de los participantes, así como recomendaciones antes, durante y después de la toma.
Recomendamos que leas esta guía dos veces, una antes de la sesión para prepararte, y otra unos días después, para ayudarte a interpretar la experiencia vivida.
Acerca de la Ayahuasca
La ayahuasca se prepara mediante una decocción de diferentes plantas de origen amazónico. Durante siglos, distintos habitantes de la amazonía han utilizado esta bebida como parte de su medicina tradicional, así como en rituales espirituales.
En los últimos años su uso se está expandiendo, globalizando y alcanzando a personas en otros países que se acercan a ella como herramienta de desarrollo personal, espiritual o con fines terapéuticos. La ayahuasca se consume en sesiones que son guiadas por un facilitador o guía; una persona con experiencia en estos procesos, qué sirve la ayahuasca y acompaña y atiende a los participantes.
Composición
La ayahuasca se prepara cocinando juntas dos plantas, la liana ayahuasca (banisteriopsis caapi), y las hojas de Chacruna (psychotria viridis). Si bien esta es la fórmula más extendida, también se puede preparar con otras plantas como la Chagropanga (diplopterys cabrerana, para hacer el “yagé” colombiano)
En esta sesión la bebida está compuesta de liana ayahuasca (banisteriopsis caapi), y las hojas de Chacruna (psychotria viridis).
Efectos
Después de beber la ayahuasca, los efectos se empiezan a notar entre los 15 y los 60 minutos, y duran entre 2 y 5 horas. La Ayahuasca induce un estado expandido de conciencia donde es frecuente tener visiones y alteraciones en la forma de pensar y de percibir la realidad. Con frecuencia emergen recuerdos del pasado y pueden aflorar emociones que se experimentan de manera más intensa de lo normal.
Muchos consideran la ayahuasca como una especie de espejo del interior de uno mismo, donde poder ver mejor los conflictos internos, miedos o emociones difíciles, pero también partes maravillosas y positivas de su vida. Las experiencias con la planta no se repiten, cada vez que una persona toma la experiencia es distinta, así como es distinta para cada persona.
La planta frecuentemente hace emerger material profundo del inconsciente y puede abrir procesos muy profundos de trabajo personal que en algunos casos requieren mucho tiempo para ser adecuadamente elaborados y completados.
La ingesta puede provocar vómitos y diarrea, ambos temporales y no patológicos. En las tradiciones amazónicas ambas cosas con interpretadas como “el trabajo de planta” una forma de limpieza emocional, corporal y energética.
Debido al profundo impacto que puede tener en la vida de una persona tomar Ayahuasca, muchos guías sugieren que nadie debe recomendar a otra persona que la tome o no la tome, pues esta es una decisión sumamente personal y que nunca debe ser inducida. A mediano y largo plazo el efecto que la ayahuasca tiene sobre cada persona es impredecible y varía de grupo a grupo y de persona a persona, pero se puede afirmar que a veces puede traer cambios muy profundos en la vida de las personas, y esto es algo que aquellos interesados en tomar deben tener en cuenta.
La Ayahuasca es presentada a veces como una panacea. Sin embargo, solamente es una herramienta, que en el caso de ser bien utilizada, puede actuar como catalizador del proceso terapéutico, generando mayor conciencia y, en caso de un uso inadecuado e irresponsable, puede empeorar ciertos problemas o incluso generar nuevos.
Beneficios
Algunos académicos opinan que la ayahuasca actúa como adaptógeno, ayudando a las personas a encontrar un mejor encaje consigo mismas y con su entorno, existen gran cantidad de relatos de personas que tras un proceso con la ayahuasca dicen haber recibido un beneficio claro tanto personal como para su entorno cercano.
Dependiendo de la situación de cada persona los efectos varían, pero existen relatos de resultados terapéuticos para gente con un rango de problemas que abarca desde la depresión, el burn-out, el duelo, uso compulsivo de drogas, culpa, dolor emocional, traumas de la infancia y aceptación de la muerte, hasta temas más cotidianos o del día a día, como la dirección vital, problemas en el ámbito profesional, problemas de relaciones, etc. El espectro es amplio, sin embargo, lo que parece establecido es que aunque la ayahuasca puede ayudar mucho, en general no basta solo con tomar ayahuasca.
Para que se produzca un beneficio terapéutico que sea sostenido en el tiempo es necesario un trabajo terapéutico más amplio, antes y después de la toma. La Ayahuasca no es una varita mágica que haga que todo se solucione o cure en una noche, no es infalible, ni un atajo en el difícil proceso de crecimiento personal que pueda ofrecer grandes resultados sin ningún esfuerzo adicional.
Los procesos personales de transformación profunda requieren mucho trabajo, tiempo, dedicación y a menudo intervención de profesionales de varias disciplinas como psicoterapeutas, terapeutas psicocorporales, y soporte de la familia y/o la red de apoyo de cada uno.
Es más útil entender la planta como una linterna, que ayuda a alumbrar partes de vida de las personas que están poco claras, más que como una medicina que “cure” problemas solo con tomarla..
Riesgos
Durante la toma, la ayahuasca puede tener efectos potentes, que pueden entrañar ciertos peligros, especialmente si la persona no está bien atendida. Por ejemplo, puede provocar mareos y en casos esporádicos desmayos. Con una atención adecuada estos episodios se pueden prevenir o resolver bien, pero sin atención tienen riesgos adicionales, como caídas o vómitos con ahogo. La clave en estos casos es la calidad de la atención y las medidas de seguridad tomadas por los organizadores.
Existen también situaciones que se dan muy infrecuentemente, pero entrañen otros peligros. Puede ocurrir que tras tomar ayahuasca los efectos se mantengan más tiempo de lo normal. También han ocurrido casos muy poco frecuentes donde se desencadenan brotes psicóticos que necesitan de medicación para remitir, o incluso de un tratamiento continuado. En muchos de estos casos había una condición psiquiátrica previa, o una historia familiar de problemas psicológicos, pero en otros casos se trataba de personas sin antecedentes conocidos y que luego han atravesado por este tipo de experiencias.
En general, una preselección por parte de los organizadores, que evalúe la posibilidad de padecer algunas de las patologías citadas, una preparación psicológica de quién va a tomar y un contexto controlado de la toma, sumado a una integración adecuada de la experiencia, son clave para reducir los riesgos relacionados con el uso de ayahuasca.
Adicionalmente, se pueden encontrar una serie de riesgos más sutiles, que aparecen después de la sesión, incluso mucho tiempo después, y que tienen que ver con interpretaciones peligrosas de los contenidos que han emergido durante la sesión. Por ejemplo, la gente puede sentir que la ayahuasca “les ha dicho” que su trabajo o su pareja no les conviene, que han sido víctimas de abuso, o que son o están destinados a ser chamanes. A veces, esos mensajes, en lugar de verdades literales, son expresiones de la dimensión inconsciente de la propia persona. Antes de decidir lo que realmente significan es conveniente actuar con prudencia y elaborar la interpretación adecuadamente al lado de personas preparadas.
Por último, hay una serie de riesgos ampliamente reconocidos por las culturas y tradiciones amazónicas. En su cosmovisión tomar ayahuasca produce una “apertura espiritual” que implica estar expuesto a fuerzas de origen energético, que pueden resultar positivas o negativas para los participantes. De acuerdo con la mirada de estas tradiciones, las personas que guían sesiones deben realizar una larga formación de muchos años, para aprender a cuidar y asistir adecuadamente a los participantes por medio de diferentes saberes y técnicas. Dependiendo de la formación de cada guía, esta visión puede estar más o menos presente en la sesión en la que participes.
Cuando no tomar Ayahuasca: Seguridad y criterios de exclusión
Contraindicaciones físicas:
No se recomienda la ayahuasca para personas con problemas cardiovasculares graves (la ayahuasca aumenta ligeramente los parámetros cardiovasculares), de glaucoma, desprendimiento de retina, hipertensión grave, fracturas o cirugías recientes, enfermedades infecciosas agudas, tuberculosis, epilepsia, convulsiones, accidente cerebrovascular, enfermedades graves del hígado, vesícula, riñones o páncreas, ciertos casos de úlcera gastroduodenal o gastritis ni hemorragia digestiva.
Tampoco se recomienda para personas embarazadas, lactando o con problemas para vomitar.
Contraindicaciones psicológicas:
La ayahuasca no está indicada en personas con crisis de pánico, algunas patologías psiquiátricas graves como bipolaridad, esquizofrenia, trastorno límite de la personalidad, etc. Si la persona ha tenido antecedentes de depresión grave, intentos suicidio o de autoagresión, es importante informar de ello al guía.
Contraindicaciones farmacológicas:
No es indicado el uso de ayahuasca junto fármacos o sustancias inhibidoras de la monoamino oxidasa (IMAO), fármacos o medicaciones con efecto sobre el sistema serotoninérgico, al igual que con varios antidepresivos y psicofármacos. Si la persona está tomando fármacos de este tipo es importante informar de ello al guía.
Sustancias psicoactivas incompatibles:
Existen sustancias como la cocaína, las anfetaminas o la MDMA que pueden interactuar negativamente con la ayahuasca, por lo que no se recomienda su combinación. Los efectos pueden resultar en crisis hipertensivas.
La Iboga, la cocaína y las anfetaminas se deberían suspender al menos 72 horas antes de la ceremonia, el MDMA 96 horas antes y otros opioides al menos 120 horas antes.
La ayahuasca no es ni debe ser utilizada como un sustituto de psicoterapia ni de cuidados médicos.
Una de las mayores contraindicaciones de la ayahuasca es simplemente no querer tomar ayahuasca. Esto quiere decir que la decisión de participar en una sesión siempre tiene que tomarla la propia persona; no debe ser inducida por otras personas. La decisión se tiene que basar en una idea clara de potenciales efectos, riesgos, beneficios y contraindicaciones en relación con el historial médico, la salud mental y el estado de ánimo general. Nunca debes tomar ayahuasca si no quieres verdaderamente hacerlo.
Por último, en caso de tener algún tipo de enfermedad o de usar medicación crónica (incluidas las herbales) el participante deberá consultarlo previamente con la persona responsable de la sesión.
Antes de la sesión
Recomendaciones antes de la ayahuasca
Preparación – En general se considera que una buena sesión de Ayahuasca empieza en la preparación y termina en la integración. El compromiso que cada participante asume en la semana o semanas previas y en la adecuada elaboración posterior del material impactará enormemente la calidad de la vivencia.
Una buena condición física ayudará a tener una experiencia con ayahuasca más fluida y quizás también más segura.
Así mismo, es recomendable llevar ropa cómoda y abrigo suficiente.
Comidas .
Los participantes pueden prepararse para la sesión tomando comidas sanas y ligeras.
Para esta sesión se recomienda no comer fritos, comidas pesadas o grasosas dos o tres días antes. Comúnmente se aconseja procurar que la última comida tenga lugar unas 6 horas antes de la toma.
También es importante mantener el cuerpo hidratado, ir a la ceremonia habiendo descansado previamente, evitar el consumo de alcohol, de estimulantes, de opiáceos y de otras drogas en la semana previa a la toma.
Distintas etnias indígenas tienen variaciones respecto a sus recomendaciones de preparación, pero en general desde su punto de vista es recomendable como mínimo abstenerse de consumir cerdo, picante, alcohol, condimentos fuertes.
Reducir expectativas – Hay personas que después de una ceremonia de ayahuasca adquieren nuevas perspectivas sobre sí mismas, los demás, las relaciones. Algunas personas sienten un notable poder terapéutico, una serie de cambios constructivos a partir de la experiencia. Pero esto no se puede predecir, la experiencia para cada uno es única y diferente. Hay también personas que no sienten nada, o sienten un efecto apenas perceptible, necesitan trabajo interno adicional antes de lograr generar cambios, lo que puede deberse a muchos factores. Por ello es muy importante hasta donde se pueda reducir las expectativas de cara a la toma, evitando expectativas irreales o fantasiosas que conducen después al desencanto o la frustración.
Dar espacio a la experiencia – Las experiencias con ayahuasca pueden ser muy profundas, por ello, es bueno crear espacio para la experiencia, por ejemplo estar libre de trabajo un día antes y un día después de la sesión
También pueden ayudar las prácticas que promuevan la relajación, la conexión con uno mismo y la concentración antes y después de la experiencia.
Una adecuada preparación y una actitud de respeto durante la misma contribuyen al buen desarrollo de una sesión.
Recomendaciones durante la sesión Ayahuasca
Empezar con cautela – Cada participante contribuye al buen desarrollo de la sesión. Se recomienda a los que toman ayahuasca por primera vez, que empiecen con una dosis baja, para que se familiaricen con los efectos de la ayahuasca.
Establecer propósito o intención – Antes de tomar es útil establecer una intención definida que dará dirección a la toma, que sea realista y sea enunciable en palabras. Una vez establecida la intención se recomienda entregarse a la experiencia, no resistirse a la misma y confiar en el proceso.
En caso de poco efecto – La ayahuasca es una planta poderosa, es importante tomarla con respeto. Aunque a veces parece que no está haciendo efecto, a menudo basta ponerse de pie e intentar caminar al baño para darse cuenta de la potencia de los efectos. Otras veces los efectos son bastante sutiles y requieren paciencia.
Demasiado efecto – Otras veces los efectos pueden ser muy intensos. Una opción para los momentos difíciles es respirar lento y profundo desde el estómago, enfocarse en la música, dejarse llevar por los efectos, y tener confianza en el proceso de la ayahuasca y en la persona que guía la sesión.
Cuando esto sea necesario, no hay que dudar en pedir apoyo. Las personas que guían están allí para atender estas dificultades, es parte de su trabajo y deben estar capacitadas para apoyar a todo el que lo necesite.
Mantenerse en el recinto – Durante la sesión es desaconsejable salir del espacio donde se está sin avisar al guía, al acabar la sesión es imprescindible quedarse unas horas en el lugar para descansar debidamente antes de conducir vehículos o salir al mundo exterior
Postura – Algunos guías recomiendan mantener una postura vertical (sin acostarse) que permite una mayor sensación de eje interior. Sin embargo, las personas con una necesidad muy fuerte de control, pueden obsesionarse con esto, para estas personas puede venir bien lo contrario, es decir, tenderse y relajarse.
Comportamiento – En la medida de lo posible es importante no interferir en los procesos de los otros participantes o de hacer ruidos o interrupciones sobre la ceremonia, salvo en caso de pedir apoyo. Interrumpir a los demás participantes con preguntas, ruidos o comentarios distrae y perturba la experiencia propia y de los demás.
También es relevante considerar que cada uno está dentro de su proceso propio y comportarse de manera respetuosa, entendiendo que la libertad de cada uno termina donde empieza la libertad del otro y que -por mucho que una persona esté en su proceso- debe intentar no afectar al proceso de los otros. En síntesis, dado que la experiencia suele ser muy personal, íntima y muchas veces caracterizada por contacto profundo con el mundo interior para bien de uno mismo y de los demás, es deseable mantener la discreción, el silencio y la concentración durante toda la vivencia.
Por razones similares, algunos guías piden que participantes que son pareja, familiares o amigos, que no se sienten juntos, sino más bien alejados, para que se concentren en su propio proceso y no se interrumpan mutuamente.
Concentración – La música y la respiración pueden ayudar al enfoque. Usualmente se invita al “ir hacia dentro” se sugiere cerrar los ojos durante la experiencia y no hablar con nadie salvo verdadera necesidad.
A veces las distracciones o intervenciones externas pueden ser una forma de lidiar inadecuadamente con una resistencia interna hacia afrontar a temas emocionales difíciles de abordar, temas que se están evitando a base de distraerse a uno mismo y a los demás.
En general durante la sesión se sugiere ir siempre hacia una postura de paciencia y tranquilidad.
¿Cómo será el día después de la sesión en la que vas a participar?
Desayuno y después integración de 3 o 4 horas. Comida y descanso. Comenzamos nuevamente la preparación sobre las 20:00.
Recomendaciones después de la Ayahuasca
Contenidos de la sesión
El material que aparece durante la ceremonia puede tomar forma de visiones, ideaciones y tomas de consciencia… A menudo los participantes encuentran que han recibido lecciones, indicaciones o inspiraciones. Frecuentemente, después de una sesión de ayahuasca, la persona se va a casa con nuevas perspectivas sobre ciertos aspectos de su vida, a veces también con ganas o intención de cambiar ciertas cosas, ajustar comportamientos, dar nuevos impulsos a relaciones (o frenar otras), etc. Frecuentemente, para que este impulso se convierta en cambios sostenidos en el tiempo es necesario un trabajo terapéutico más amplio, con integración, seguimiento y persistencia, de lo contrario podría no alcanzar los resultados esperables.
Proceso de Integración – A medio plazo, para poder interpretar y procesar el material que ha surgido hace falta entender la forma en que opera la Ayahuasca, y saber que muchas veces se expresa a través de símbolos, en forma semejante a los sueños. Este procesamiento de lo vivido resulta mucho más fructífero cuando ocurre con el acompañamiento de una persona debidamente formada que ayude al discernimiento y a llevar a la vida cotidiana estas lecciones y aprendizajes, para que no se pierdan con el paso de los días. Lo óptimo es un psicólogo, psicoterapeuta y con conocimiento de las plantas psicoactivas y experiencia en integración. Esta elaboración también ayuda a prevenir confusiones en las interpretaciones, y evitar cierta “inflación del ego” que no siempre, pero a veces viene asociada a sustancias que permiten la expansión de la consciencia.
Evitar decisiones importantes en caliente – Si la sesión de ayahuasca lleva a un participante a considerar grandes cambios vitales, o a trabajar sobre problemáticas personales serias, es muy importante no tomar decisiones importantes en días ni semanas posteriores a la toma, por lo menos un par de semanas (con la excepción de decisiones como dejar las drogas, o dejar relaciones abusivas, etc). Para otro tipo de decisiones conviene recordar que la ayahuasca no da órdenes, la ayahuasca no te dice que dejes tu trabajo, es más certero entender que te dice que tu trabajo no te gusta nada. En cualquier caso no es buena idea dejar el trabajo “en caliente” de un día para otro (de nuevo a menos de que haya maltrato o peligro para uno). Para cambiar de trabajo, quizás es mejor pensarlo con cuidado, hacer un plan de transición, ahorrar algo de dinero, etc. Y así con todo, con el tiempo lo que parecía muy claro puede llegar a parecer lo opuesto, al mismo tiempo, si el mensaje es importante y verdadero, seguirá siendo verdadero tres semanas después de haber tomado la ayahuasca. Entender la necesidad de hacer cambios vitales puede ser uno de los grandes regalos de la ayahuasca, bien hecho puede ser un paso de evolución personal, mal hecho puede llevar a un periodo muy difícil, por ello es ideal contar con el apoyo de un/a terapeuta o una persona capacitada para ayudar en esta fase.
Hablando con los demás – También es importante tener en cuenta que muchos de sus conocidos que no la han tenido experiencias parecidas pueden tener dificultades para entender la experiencia que se ha vivido con la ayahuasca. Es un buen consejo, para los demás y para uno mismo, entender que el mejor momento de sacar las cosas a la luz es cuando las puedan contar como decisiones propias “he decidido x” en vez de como responsabilidad de la ayahuasca. Decir “la ayahuasca me dijo que tenía que hacer X” como explicación a un cambio es una forma de evadir la responsabilidad personal.
Los días después de la sesión
Se recomienda estar tranquilo, no tomar grandes decisiones (todavía!)
Se puede volver a la alimentación normal e ir integrando lo sucedido con cautela.
Dudas
Si después de leer esto tienes dudas apuntalas. Habrá una entrevista previa a las sesiones donde me las puede preguntar.
Si tienes dudas después de la sesión me puedes contactar en cualquier momento.
¿Cuándo puedo volver a tomar ayahuasca?
La frecuencia y la intensidad recomendable varían enormemente de una persona a otra y de una época de la vida a otra.
Para terminar
Teniendo en cuenta estos consejos y recomendaciones de seguridad, una adecuada y cuidadosa ceremonia de ayahuasca pueden ser muy benéficas y enriquecedoras para la vida de las personas, ¡te deseamos un proceso fértil y buena ceremonia!
ANEXO: Ética, Derechos y Deberes de guías y Participantes
Mucho de lo que ocurre en una sesión de ayahuasca puede ser completamente nuevo para las personas que participan.
Para evitar malentendidos comunes, este Anexo complementa el documento anterior, describiendo no lo que va a ocurrir, sino el lugar, o postura, desde la cual se estructura la sesión
Derechos del participante
- Derecho a tener una experiencia segura y constructiva en un entorno y con un guía que les despierte confianza
- Derecho a recibir información adecuada y suficiente sobre: la ayahuasca, sus indicaciones, contraindicaciones, el tipo de sesión que se realizará, la experiencia, educación y entrenamiento del guía, los criterios de exclusión con los que trabaja y si sigue determinado código ético
- Derecho a una entrevista previa (en caso de la primera vez que se toma) y a rellenar un formulario de salud.
- Derecho a que los organizadores le expliquen claramente los riesgos potenciales tengan un plan de riesgos
- Derecho a que el guía respete la integridad de los participantes manteniendo los límites adecuados a una relación de cuidado, incluyendo:
- Mantener el acuerdo financiero establecido inicialmente
- Que los datos privados sean respetados
- Ser previamente informado si en la sesión hay trabajo por medio del contacto físico, de qué tipo es, y a dar o no su conformidad
- Que no se realice ningún tipo de acercamiento sexual ni tampoco emocional.
- Derecho a ser respetado en sus creencias espirituales y no se le imponga ningún dogma
- Derecho a contar con personal de apoyo de su mismo género durante la sesión
- Derecho a que se le ofrezca un espacio seguro donde quedarse a dormir o descansar después de la experiencia.
- Derecho a realizar contacto posterior con el guía de la ceremonia en los días, semanas o meses siguientes y recibir soporte y/o derivación en caso de necesidad.
- Derecho a recibir una adecuada integración y asimilación de la experiencia o ser referido a un profesional para promover una adecuada elaboración del material
Deberes del participante
- Deber de proporcionar al guía información completa y verídica sobre su estado de salud presente, condiciones previas, etc. sin omitir ni cambiar datos importantes. Deber de consultar cualquier inquietud al respecto y no quedarse en silencio.
- Deber de seguir adecuadamente la preparación indicada por el guía para el antes y el después de la sesión.
- Deber de mantener una actitud de respeto hacia la sesión y sus reglas, los facilitadores, y los otros asistentes, comportándose de una manera adulta, entendiendo que la libertad de uno termina donde empieza la libertad de los otros
- Deber de evitar interferir en los procesos de los demás, así como de respetar el secreto y la privacidad de sus vivencias.
- Deber de permanecer en el espacio de la sesión hasta que esta termine, posteriormente y por seguridad no abandonar el recinto hasta que los efectos hayan desaparecido por completo y/o el guía lo autorice.
Deberes del guía
La persona que sirve la ayahuasca toma una serie de responsabilidades básicas de cuidado y atención para los participantes.
Algunos criterios mínimos que la persona que guía debe cumplir:
Antes
- Debe dar información detallada y objetiva sobre la ayahuasca, el tipo de ceremonia, los componentes y origen de la ayahuasca que da, si es un análogo de la ayahuasca (anahuasca), a que los participantes pasen por una entrevista previa y rellenen un formulario de salud.
- No debe permitir participar a personas con contraindicaciones dentro de sus criterios de exclusión.
Durante
- Debe trabajar con grupos pequeños o contar con asistentes para atender a todas las personas que participan. La proporción recomendada es un asistente por cada cinco o seis participantes.
Después
- Debe proveer un espacio donde las participantes puedan quedarse a dormir in situ al final de la sesión.
- Una vez terminada la sesión debe ofrecer integración y la opción de seguimiento.
Siempre
- La ayahuasca puede llevar a la gente a tener experiencias muy poderosas y transformadoras, por ello las personas que las guías deben estar debidamente formados y tener amplia experiencia. Debe seguir unos principios éticos.
Básicamente, el o la guía debe cuidar a los asistentes antes, durante y después de la sesión.
Lo que un guía de ayahuasca NO es:
- No es un gurú, ni un maestro de vida, ni (salvo excepciones puntuales) alguien con la formación de coach, de médico, de psicólogo, o de psiquiatra. Esto significa, que sí emergen preguntas de esta índole, el o la guía debe mantenerse dentro de los límites de su conocimiento, y dirigir al consultante hacia otras personas expertas en dichas áreas del saber.
- No es alguien que pueda dar garantías acerca de los resultados o que deba prometer panaceas. Nadie que esté garantizando ningún resultado a priori con la ayahuasca está siendo completamente honesto.
- El o la guía está para servir a los demás, no para servirse de ellos, ni económica, ni emocionalmente.
- No debe ser ni convertirse en pareja romántica o sexual de los participantes. Tampoco debe establecer relaciones económicas con ellos distintas a las acordadas antes de la sesión. Si hace cualquiera de estas cosas, estaría poniendo en peligro la eficacia de su trabajo, traicionando su vínculo con el participante, y perjudicando el buen proceso con la planta.
Esta guía ha sido creada de muchos años de experiencia con el apoyo y trabajo del grupo científico y etnobotánica ICEERS.
Desde Retiros de Ayahuasca y su equipo interdisciplinar de psicólogos, terapeutas, facilitadores, músicos y medicos tradicionales, os esperamos para un viaje hacia la totalidad de vuestra naturaleza.